Cantabria tiene lugares mágicos, lo descubrimos en su bosque de secuoias. Este bosque tan auténtico es uno de los lugares más increibles que haya fotografiado. Los inmensos árboles que ocultan la luz del Sol abrazan los momentos que nos regalaron Sara y Eleder en su sesión de Postboda. Cruzamos algunos kilómetros más hasta llegar a Santillana del Mar, pueblo bonito donde los haya. Buscamos el atardecer en la costa cantábrica con los rayos de luz que inundan y subrayan esos besos de recién casados.